El Zorro y el León

Había una vez un zorrito llamado Zuri. A Zuri le gustaba mucho jugar en el bosque. Un día, mientras buscaba frutitas rojas, Zuri vio un animal nuevo. ¡Era un león! El león era grande, muy, muy grande. Tenía mucho pelo alrededor de su cara, como un sol.

Zuri tuvo mucho, mucho miedo. ¡Su corazón hacía PUM, PUM, PUM! Se escondió muy rápido detrás de una piedra. ¡Qué susto! Miró al león y vio que solo abría la boca para bostezar. ¡ZZZ! El león se durmió.

Otro día, Zuri vio al león en el río. El león era grande, ¡muy grande! Esta vez, Zuri tuvo un poquito de miedo. ¡pum, pum! Se escondió detrás de un árbol y miró. El león solo bebía agua y movía su cola. Parecía muy bueno.

Después, Zuri se encontró otra vez con el león. ¡Estaban muy cerca! Pero esta vez, Zuri ya no tuvo miedo. ¡Nada de miedo! Se sintió muy valiente. Zuri sonrió y se acercó. Dijo con una voz suave: “¡Hola, León!”.

El león le sonrió también. “¡Hola, Zorrito!”. ¡Y se hicieron amigos! Zuri descubrió que el león era muy simpático y jugaron juntos en el bosque. ¡Y es que a veces, las cosas que dan miedo al principio, luego son divertidas!